¡Happy Monday!
Nada es más importante en la vida que nuestras relaciones personales. Desde la relación con nuestra familia, amigos, pareja, hijos, gente del trabajo.
Tener relaciones cercanas, basadas en la confianza mutua y en el cariño profundo es muy importante para ser feliz ya que cuando las experimentamos satisfacemos una de las seis necesidades psicológicas básicas del ser humano: el amor y la conexión, o dicho de otra forma, la necesidad de sentirnos cercanos y apoyados por otras personas.
Está comprobado que las personas que disfrutamos este tipo de relaciones en líneas generales somos más felices, disfrutamos de mejor salud e incluso vivimos más tiempo.
Por ello, este vídeo de hoy está dedicado a aquellas personas a quienes, por los motivos que hayan vivido en su vida, les cuesta realmente intimar, o sea compartir su corazón de forma abierta, con otras personas y se encuentra frecuentemente poniendo barreras y frenos en sus relaciones.
Te contaré que esto no tiene nada que ver con la «simpatía», ya que puede haber gente muy simpática, pero que a la hora de compartir su corazón con un amigo, con un hermano o con una pareja, no lo haga.
Hay, también gente muy acogedora y cálida, de quien parecería raro que la intimidad les costara, ya que son personas con quien los demás se abren muy bien, porque saben escuchar y apoyar a los demás. Pero a la hora de compartir lo suyo, de dejarse apoyar te levantan una barrera y hasta ahí llegaste.
Si eres una de estas personas que te cuesta desarrollar relaciones realmente profundas porque tienes miedo a compartir tu corazón con otras personas, este vídeo es para ti.
Si tú no eres así, pero tienes cerca una persona que sea así, comparte este post y vídeo con ella. Estoy segura que la hará reflexionar.
Un abrazo y que tengas una semana llena de relaciones increíblemente bonitas!